jueves, 2 de febrero de 2012

Cántico de gratitud, S.

Asturias. Una Biblia y algún versículo apuntado en hojas cuadriculadas. Risas sin sonido y sin gracia. Discusiones de volver llorando a casa, pero no sobre nosotros, sino sobre ELLOS. Hojas enteras escritas en un lingüístico lenguaje, cuidadosamente guardadas en el diario. Codazo y pregunta correctamente flanqueada por sus dos respectivas interrogaciones. Consejos, críticas y tardes de Chomsky. Providencia, me gusta llamarlo así. Su plan es mucho más maravilloso que el nuestro. Pobre idiota, creí que lo mejor ya había pasado.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario